viernes, noviembre 24, 2006

Resumen y vuelta al número mágico

Volvemos a escribir una nueva crónica tras casi dos meses de silencio. En todo este tiempo han tenido lugar dos partidos de fútbol (¡con 10 jugadores!) y otros tres de baloncesto. También hay que contabilizar de jornadas en las que no se jugó.

Pero no hablemos del pasado (lejano) y hablemos del memorable partido de ayer. Nada más y nada menos que nueve jugadores se reunieron en el terreno de juego para disputar el tercer encuentro de nuestra particular liga de pachangas.

Por el equipo local jugaron Iñigo, Oscar, Juan y Lolo, y por el visitante Carlos, Sergio, Pepe, Jaime y Matias la nueva promesa proveniente de la liga de pachangas alemana.

El partido comenzó con los jugadores entumecidos por el frío y algo extrañados al enfrentarse a un terreno de (casi) completamente seco. El resultado fue un intercambio de jugadas intrascendentes. Sin embargo los visitantes entraron pronto en calor y en una rápida combinación se adelantaron colocando el 0-1 en el marcador.

La jugada fue muy aplaudida desde las vacías gradas por la belleza de su elaboración en la que participó todo el equipo local.

Justo después Matthias, recién incorporado en el terreno de juego, robo un balón al cierre y colocó el 0-2.

Lejos de desanimarse los locales se “echaron pa’lante” y fruto de un rocambolesco tiro sin ángulo que rebotó en un defensor local vino el primer gol local 1-2.

El marcador no aguantó mucho con este resultado porque un pase por arriba a la espalda de la defensa local dejó a Sergio sólo en el área ante el jugador local que hacía las veces de portero. El posterior control y pase permitieron que Carlos marcara a puerta vacía 1-3. Poco después un despeje de fortuna permitió que Carlos anotara el segundo gol en su cuenta particular, situando el marcador en un cómodo 1-4 para los locales.

Los visitantes bajaron revoluciones y los siguientes minutos resultaron en un intercambio de oportunidades que mantuvo la diferencia en el marcador y que debió quedar en un 2-5. A destacar de este periodo el golazo de Lolo quién, con fuerza y garra, se llevó el balón entre 3 jugadores locales y acabó marcando de un punterazo de los suyos. Seguramente el mejor gol del partido. El resto de goles ya no recuerdo de quiénes fueron.

Otra jugada memorable de este periodo fue el resbalón y posterior caída de Jaime con el único charquito de agua que quedaba en el campo. Parece ser que Juan ayudó en la caída pero eso sólo pudo verse en la repetición.

Poco a poco los locales se fueron haciendo con el control de la pelota y a diez minutos del final, cuando el partido parecía acabado, llegó su minuto de oro. Una sucesión de buenas combinaciones y actuaciones personales permitió a los locales dar la vuelta al marcador tras un parcial de 5-1. No se tiene constancia de quienes marcaron los goles (se recuerdan dos de Iñigo: uno ajustado al poste izquierdo de la portería y otro después de una protestada jugada en un contra ataque tras un córner, y uno de Oscar)

Con el marcador 7-6 para los locales los visitantes volvieron a ponerse el mono de trabajo y volvieron a tomar el control del partido. La defensa de los locales era cerrada, pero no tardaron en encontrar un hueco y situar el marcador en un 7-7 que, a la postre sería definitivo.

Y cuando ya se daba todo el pescado por vendido un nuevo pase a Carlos a la espalda de la defensa local le situó en el área local con la portería vacía. Pero Lolo, que venía en carrera, le arroyó en un claro penalti. Carlos cayó por el suelo y terminó pidiendo a los asistentes la matrícula del camión.


Era la última jugada del partido y Pepe se hizo cargo del penalti. Tenía todo para acabar siendo ovacionado por el público tras un partido mediocre, pero envió el balón al palo.

El partido finalizó con un justo empate a 7 en el marcador, y con la victoria moral de los locales que jugaron con un jugador menos.

OTROS DATOS DEL PARTIDO:

Árbitro: No hubo.

Recaudación: 0 €

Héroes del partido:

Lolo por los visitantes y Carlos por los locales (aquí podía haber estado Pepe, pero falló el panlti)

Una cita: "Es que jugar sin el campo lleno de agua no es lo mismo ", Jaime al principio del partido y antes de caerse con el charquito.


TERCER TIEMPO:

Sólo Lolo y Juan fallaron a la tradicional cita tras el encuentro. En esta ocasión tuvimos la oportunidad de volver al entrañable “Pepe el Guarro” donde corrió la cerveza en 7 rondas en las que participaron todos los asistentes (salvo Sergio en la última). Sólo el limón de las cervezas de Iñigo y Matthias empañó este magnífico registro.

Con las cervezas se degustaron cuatro rondas de pollo, una de chorizo, una de oreja y, como colofón, una de pimientos del Padrón (a Iñigo le tocó el que picaba) con papas fritas.